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Aumento de la rentabilidad al optimizar y mejorar la ejecución de los procesos.
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Reducción de costes al garantizar la eficacia y mejorar la eficiencia de las operativas y reducir los costes de no calidad.
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Aumento de la satisfacción de clientes al disponer de una sistemática de medición y retroalimentación de su nivel de satisfacción.
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Obtención de puntuación
extra en adjudicaciones y concursos públicos.
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Diferenciación
positiva frente a competidores al ofrecer mayores
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Mejora de la imagen
empresarial frente a consumidores, usuarios y proveedores.
